martes, 14 de febrero de 2017

Entrega 1



Algunas ideas sobre el arte de escribir micro relatos



Entrega 1
Tendemos a pensar que el arte de escribir micro relatos es un arte complejo. Pero ¿te has parado a pensarlo?, la mayoría de las historias que contamos en la vida real suman menos de quinientas palabras.

Estás con tus amigos en un bar, relajado y pasándolo bien. Y entonces surge: «Pues en mi trabajo hay un chico...» Cuentas una historia, la creas en tu mente a medida que hablas y tratas de darle el mayor interés para así mantener cautiva la atención de tus oyentes.

Escribir micro relatos es algo parecido. No te obsesiones con los aspectos formales propios del género, con la estructura, la palabra, lo explícito y lo sugerido. Simplemente, cuenta una historia. Ahora, mientras te están escuchando.

Hay un consejo que vale para cualquier escritor de cualquier género, pero que es especialmente aplicable a la hora de escribir micro relatos: "Escribe las historias que quieres leer". No te fuerces a escribir historias para gustarles a otros, no impostes tu estilo. Si escribes lo que te gusta aflorarán tu estilo propio y las influencias de tus autores favoritos. Y esto solo puede tener consecuencias positivas.

No te preocupes sobre si tus micro relatos son o no originales. ¿Se ha contado esa historia antes? ¿Esa frase que acabas de escribir no la has leído ya en alguna parte? Lo más probable es que sí, porque tus textos se hacen eco de los de otros escritores. Ser absolutamente original después de siglos de Historia de la Literatura resulta imposible. Una vez que seas capaz de reconocer esa verdad, podrás empezar a trabajar en la construcción de un estilo propio.

Además, puedes usar en tu favor el hecho de que tu historia ya haya sido contada antes. Alude a la fuente original en tu micro relato y con pocas palabras podrás dar mucho contexto. El lector captará la referencia y sabrá de lo que estás hablando sin necesidad de entrar en más detalles.

¿Ya tienes tu historia? Pues ahora comprime, reduce, poda. Haz que cada palabra cuente, sea esencial, tenga sentido, aporte algo. Pero no tengas miedo de ampliar donde lo consideres necesario para dar cabida a determinados detalles. Puedes incluso incluir alguna floritura. Si tú no te diviertes escribiendo un micro relato, no esperes que el lector se divierta cuando lo lea.

Dejar solo lo esencial es complicado, ¿no es cierto? Por definición, en el micro relato no hay espacio suficiente para incluir explicaciones, contextos previos, ideas elaboradas, etc.

Así que tendrás que dejar pistas. Insinuar una historia mayor que se esconde detrás de las palabras de la página, pero que precisamente el lector vislumbra con claridad gracias a esas palabras.

Tienes que lograr involucrar al lector. De hecho, el lector desea ser involucrado, saberse capaz de resolver el puzle y completar la historia. Y te agradecerá que tus textos indiquen que valoras su inteligencia.

Libera tu imaginación. Amplía tus conocimientos. El mundo de un escritor, si este quiere ser convincente, debe abarcar el universo entero. Vuélcalo todo en tus micro relatos. No tienes que explicar cada cosa, el lector tiene la mente abierta cuando se enfrenta a tus textos y espera que le sorprendas. Si pretendes acotar terreno a base de dar explicaciones solo estarás poniendo de manifiesto los estrechos límites de tu imaginación.

Para acabar, revisa lo que has escrito. Asegúrate de que, por estar demasiado pendiente de la cantidad (de palabras) no has descuidando la calidad. Presta atención al orden y al significado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario